¿Casualidad o amaño? Las dudas que existen sobre el Draft de la NBA
El número 1 del Draft de 2025 recayó en manos de Dallas Mavericks después del traspaso de Luka Doncic y unas opciones remotas de obtenerlo.
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Dallas Mavericks tenía un 1,8% de probabilidades de ser el equipo que obtenía la primera elección del Draft de la NBA en 2025. La suerte se aliño para que la franquicia tejana fuese designada como la poseedora de la elección más alta en el sorteo de talentos juveniles de la NBA, después de traspasar a Luka Doncic hace pocos meses.
Este hecho ha suscitado todo tipo de teorías de la conspiración entre muchos aficionados por las circunstancias en las que se produjo el canje del esloveno. Hay que recordar que el General Manager de Dallas, Nico Harrison, únicamente quiso negociar con los Lakers el traspaso del jugador y que toda la operación se llevó en la más estricta discrección.
Todos los expertos señalaron que por el canje Dallas había salido perdiendo ante unos Lakers que cedieron a Anthony Davis, una estrella cinco años mayor que Luka y propenso a las lesiones. El hecho es que el destino ha querido que los Mavericks ahora puedan elegir para 2025 al jugador más prometedor de todos los que se presenten al sorteo.
Las sospechas
La situación no ha hecho más que alimentar una serie de teorías de la conspiración en torno a la limpieza del Draft, que a continuación relatamos. El primero en poner un atisbo de duda fue un Shaquille O’Neal que recientemente reconoció que, antes de ser el número 1 del Draft, le preguntó el comisionado de la NBA si prefería el calor o el frío.
El pívot le respondió que calor y, como por arte de magia, el favorito Minnesota Timberwolves (clima gélido) perdió ante los Orlando Magic (clima tropical) la primera elección del Draft de 1992. Pese a que los primeros tenían más opciones por su peor clasificación en la anterior temporada de la NBA, la suerte fue caprichosa.
Recompensas por cambiar de aires
Este pasaje no es ni mucho el único que existe con ciertas rarezas. Los Cleveland Cavaliers ganaron el número 1 del Draft al año siguiente de marcharse LeBron James a los Miami Heat y lo ganarían incluso dos veces más en los tres años siguientes, despertando todo tipo de comentarios. ¿Acaso a la NBA no le interesaba que su mejor jugador estuviese en un gran mercado como el de Florida?
La teoría de las recompensas por traspasar estrellas a los grandes mercados está muy a la orden del día. Justo después de que los New Orleans Pelicans traspasasen a Chris Paul a Los Angeles Clippers, al equipo de Louisiana le tocó casualmente también el número 1 -con Anthony Davis recayendo en la franquicia-. En este caso, se da todavía una variante más rocambolesca: Cuando Los Angeles Lakers adquirieron al mismo Davis en 2019 proveniente de los Pelicans, ¿saben qué sucedió? Pues que al verano siguiente el equipo de Nueva Orleans cazó a otro número 1 del Draft.
Los porcentajes
En esta vorágine de conspiraciones en las que ya nos hemos embarcado también es reseñable ver cómo la NBA permitió que el número 1 del Draft de 2008 recayese en los Chicago Bulls para que escogiesen a Derrick Rose. El futuro MVP más joven de la historia de la competición quería jugar en casa y, pese a las escasas probabilidades del equipo, su sueño se hizo realidad.
No es que queramos señalar que el sorteo del draft de la NBA esté amañado ni mucho menos, pero últimamente se están produciendo muchas casualidades que era bueno recordar. La suerte de Dallas ganando, con un 1,8% de opciones, es el caso más reciente. La cara que se le quedó a Utah Jazz, Washington Wizards y Charlotte Hornets -teniendo un 14% de opciones- cada uno debió ser un poema.
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