BALONCESTO
El All-Star de la NBA toca fondo
El evento que reúne a las estrellas de la NBA se convirtió en un festival de los horrores con menos baloncesto que nunca.
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Juego Seguro. +18 Juega con responsabilidad.
La NBA arriesgó para innovar en su All-Star, pero la cosa no salió ni mucho menos como ellos se habían imaginado. En lugar de conseguir que los jugadores se tomasen en serio el partido limitando los minutos a través de un cuadrangular, éstos decidieron seguir con la misma actitud pasiva de la última década ofreciendo un espectáculo pobre en San Francisco.
Tan pobre fue que ni el Chase Center se llegó a llenar al completo para una cita que empieza a hacerse bola hasta los más aficionados. Los datos no mienten y muestran un All-Star que tiene poca defensa. El espectáculo duró tres horas en total y apenas se vieron 42 minutos de acción sumando la duración de los tres partidos que hubo.
Anteriormente, los All-Star, como los partidos de NBA, duraban un mínimo de 48 minutos y llegaron incluso en alguna ocasión a estar en 60 con los objetivos de puntuación. Para esta edición se establecieron 40 puntos para dar la victoria en cada partido y el que más duración tuvo fue el duelo entre el equipo de Shaquille O’Neal contra las Estrellas Emergentes (Rising Stars), que se prolongó hasta los 12:54.
La final, un duelo entre los pupilos de Charles Barkley y los de Shaquille O’Neal, tuvo una duración de baloncesto de 10:54 segundos. Mientras que la primera semifinal fue la más breve con una duración de 10:07 segundos. Las cuentas, a groso modo, nos dejan entrever que las estrellas se ahorraron jugar un cuarto en esta edición y ni por esas LeBron James participó por unas oportunas molestias en el tobillo.
Un montón de relleno
El caso es que las cosas que no tenían que ver con meter canastas acapararon mucho más foco. Las presentaciones llevaron un total de 30 minutos y justo después de ellas hubo una charla pre-partido con los entrenadores-showman con una duración de 10 minutos.
Después empezaron los partidos, pero entre cada uno de ellos se entrelazó un show con una duración mínima de 5 minutos y una máxima de 9 minutos viéndose desfilar por la cancha de los Golden State Warriors desde Mr. Beast a los cantantes E-40, Too $hort, Saweetie, En Vogue y DJ Cassidy. Además, hubo tiempo para que los propios jugadores homenajeasen a sus entrenadores por esa noche vistiéndoles de pescadores.
En mitad de todo, los anuncios hicieron acto de presencia en el evento ocasionando las quejas de algunos espectadores que llegaron a contabilizar 80 minutos de publicidad para los encuentros. Además de esto, llamó poderosamente la atención que se dedicaran 28 minutos a un segmento de análisis del partido donde se contaron algunos chascarrillos. Resulta irónico que este concepto ocupara casi más tiempo que el baloncesto en la cancha.
Opinión unánime
Las redes sociales fueron las primeras en quejarse del resultado de la reforma del All-Star hasta el punto de que muchos aficionados prometieron que no volverían a ver un partido de las estrellas en estas condiciones. La reacción de la NBA a estos comentarios críticos ha sido filtrar que el domingo existe la posibilidad de que haya un concurso de uno contra uno en pos de que los jugadores se impliquen por una cuestión de honor y también por ganar un millón de dólares de premio. Antetokounmpo propuso un Estados Unidos contra Resto del Mundo.
Visto que la experiencia de esta temporada incluyendo a Estrellas Emergentes en el partido del domingo tampoco ha resultado, la NBA busca insuflar aire a un evento que puede terminar siguiendo los pasos del extinto All-Star de la liga ACB. En España, desapareció en la temporada 2001/02 y se instaló después de ello la Supercopa. Puede que para el All-Star de la NBA ya sea demasiado tarde.