El motivo oculto por el que Topuria ha renunciado a su título de la UFC
El luchador hispano-georgiano ha dejado vacante el cinturón de campeón del peso pluma para pasarse a la división superior del ligero.
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Ilia Topuria no ha querido acaparar el cinturón de campeón del peso pluma de la UFC más de un año. El luchador accedió a esta distinción tras vencer al australiano Alexander Volkanovski en el evento 298 de la compañía. Lo defendió exitosamente contra Max Holloway en el evento 308 de la UFC y en los prolegómenos del UFC 314 decidió dejarlo libre.
Esta idea de Topuria atiende a un plan muy grande y ambicioso del luchador afincado en Madrid, pero todo hay que ponerlo en contexto. Como campeón del peso pluma, Ilia sólo pudo ser el cuarto luchador del ranking libra por libra de la UFC, pero no ha podido ascender más allá de ese puesto.
Así las cosas, el hispano-georgiano decidió coger el toro por los cuernos y renunciar a su división en pos de encontrarse cara a cara con Islam Makhachev, el número 1 libra por libra. El luchador ruso tiene un récord de 27 victorias y una única derrota y ésta se produjo una década atrás cuando cayó frente al brasileño Adriano Martins en un K.O. por puñetazos.
Makhachev le desea
Desde entonces, Makhachev ha encadenado 15 victorias consecutivas defendiendo sin cuartel su cinturón de campeón del peso ligero, superando por el camino al mencionado Alexander Volkanovski en dos ocasiones, a Dustin Poirier o a Charles Oliveira.
La creme de la creme de la UFC se ha arrodillado ante él, aunque es verdad que no ha combatido contra los dos luchadores más influyentes de la década y que responden al nombre de Conor McGregor y al invicto Jabib Nurmagomédov, retirado en 2020. Es por ello, que Makhachev necesita tanto o más esta pelea con Topuria.
Ilia es la mejor presa a cazar para un luchador en la compañía gracias a su récord invicto de 16 victorias. El hispano-georgiano también le está buscando al haber subido de peso y con la esperanza de que en un hipotético combate le pueda vencer y así ascender al número 1 global de una UFC, que está encantada con el inconformismo de Topuria.
Topuria arriesga
Ha sido él quién ha salido de su zona de confort de forma voluntaria, aceptando coger cinco kilos más de peso para verse en la categoría que es ideal para Makhachev. El ruso, en un hipotético combate, tendrá ventaja por aquello de contar con 8 centímetros más de longitud y una mayor envergadura para atacar a sus rivales.
“Topuria tiene más opciones que el resto. Ilia es peligroso y puede cazar a cualquiera. Si la pelea no va como Topuria quiere, seguirá intentando buscar la manera. Si encuentra a Makhachev podría noquearle, aunque será duro de hacer”, dijo un Volkanovski que puede hablar tranquilamente de los dos contendientes, al haber combativo contra ambos y de paso haber caído derrotado.
Topuria ya ha decidido su destino y ahora está en manos de Dana White, el presidente de la UFC, decidir cuándo se miden los dos colosos. Lo normal sería que no pasase de este 2025 por intereses de la compañía, aunque también es sabido el interés del magnate estadounidense en cocer las rivalidades a fuego lento para luego sacarles todo el jugo. Ilia tiene claro que quiere el número 1 libra por libra.
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