El Nápoles consigue el Scudetto de los descartes
El equipo del sur de Italia brilla con una plantilla que se reforzó con los descartes de otros grandes clubes como el Real Madrid, el Manchester United o el Chelsea.

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A veces no hay mayor gasolina para un futbolista que ser rechazado. El Nápoles quizá no reclutó a los mejores jugadores del mundo para reforzar a su plantilla, pero sí a los más motivados. El equipo celeste consiguió su segundo Scudetto en tres temporadas con un plantel que poco o nada se parece al que campeonó en la temporada 2022/23.
El equipo perdió a sus dos principales referentes de aquella experiencia y que respondían a los nombres de Victor Osimhen y de Khvicha Kvaratskhelia. Ambos han tenido aventuras muy variopintas, con el primero aterrizando en el fútbol turco para un retiro dorado a los 26 años, mientras que el segundo fichaba por el Paris Saint Germain y jugará este año por el título de la Champions League.
Pescando con acierto
El caso es que el Nápoles no ha entrado en pánico y ha reforzado su equipo con jugadores que a priori no iban a alcanzar ese nivel. Ficharon a Romelu Lukaku, tras una vida plagada de cesiones con el Chelsea, a cambio de 30 millones. El belga ha sido el máximo goleador del equipo con 14 tantos y además ha aportado 10 asistencias de gol.
El delantero se ha reivindicado a sus 32 años y ha callado la boca a todos los aficionados del Inter de Milán que le pusieron la cruz tras la final de Champions de hace dos temporadas. Lukaku ha dejado al equipo nerazzurri sin el Scudetto de esta temporada, tras resolverse por apenas un punto de ventaja a favor del Nápoles.
El belga no ha sido el único que ha despuntado. Otro descarte, en este caso del Manchester United, como Scott McTominay ha firmado el año de su vida con 12 goles jugando como mediapunta en el Nápoles. El equipo inglés, reciente perdedor de la final de la Europa League, lo vendió por otros 30 millones. Los dos fueron los goleadores del Nápoles en el partido que certificó su título ante el Cagliari.
Además de estos casos encontramos futbolistas que reforzaron el equipo para esta temporada tras ser descartados en el Real Madrid, el Benfica o el Brighton. En total, el equipo se gastó 150 millones para sustituir a una columna vertebral que ahora mismo estará muy arrepentida de ver cómo sus logros se han diluido.
En casa también acertaron
Pero no sólo de equipos extranjeros se ha reforzado el Nápoles. El equipo también se aprovechó de conjuntos de casa como la Roma. El equipo de la capital permitió la salida de un Leonardo Spinazzola que a sus 32 años ha sido un filón como lateral zurdo del esquema de Antonio Conte.
El Torino también puso su granito de arena cediendo los derechos del central Alessandro Buongiorno, uno de los más prometedores de Italia a sus 25 años y que está valorado en 45 millones de euros, según Transfermarkt. El Nápoles lo sacó por 10 millones menos de su valor de mercado siendo el líder indiscutible de su zaga.
Mientras que el AC Milán ha aportado en este Scudetto con la cesión de un Noah Okafor que ha sido una de las sensaciones del campeonato desde el banquillo. El Nápoles ha dado ejemplo de que se puede ser un club ganador con los descartes de otros. Quizá algún día algún director se aventure a hacer una película al estilo de Moneyball con los logros de este equipo de descartes y por el que nadie apostaba a principio de temporada.
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