La NBA no ha conocido en su historia otra cosa que no sea el crecimiento de tamaño, aunque lleva casi dos décadas sin incluir nuevos equipos desde que aceptaron a los Charlotte Bobcats -actuales Hornets- para completar la actual competición de 30 franquicias.

Tras años y años de negativas, parece que finalmente la mejor liga de baloncesto del mundo está abierta a incluir dos nuevos proyectos al término de la temporada 2024/25.

Los focos miran a varias ciudades e incluso países en este momento, con Las Vegas siendo la apuesta más segura para incorporarse a medio plazo. La antigua ‘Ciudad del pecado’ ha mutado en la ciudad del deporte con una gran cantidad de eventos en los últimos meses que la han puesto completamente en el mapa.

La exitosa Copa NBA que se celebró hace escasas fechas pone de manifiesto el interés de esta ciudad que ya tiene franquicias de NFL y NHL.

Con Las Vegas, casi dada por seguro en esta ampliación de la competición, existen tres vías que la NBA está estudiando muy seriamente. La más sencilla sería devolver a Seattle -campeones en 1979 y finalistas en 1996- su condición de ciudad NBA después de que Oklahoma City se llevase a los míticos Sonics para convertirlos en los Thunder en 2007.

La ciudad tiene una enorme tradición de baloncesto, un pabellón impresionante y un equipo como las Seattle Storm -cuatro títulos de WNBA- como gancho para consolidar un regreso exitoso. La NBA, sin embargo, sabe que segundas partes a veces no son buenas, pese a ser el único gran mercado estadounidense donde no están presente en este momento sin contar con Pittsburg y San Diego.

Mirando fuera del país

Precisamente acercándonos a la frontera con México encontramos que el país vecino tiene un pujante interés en tener una franquicia NBA. La liga ya ha disputado en DF varios partidos de temporada regular de forma exitosa con enormes afluencias de público, pero hay varios factores que echan atrás a la competición estadounidense.

La falta de jugadores mexicanos en la NBA, la inseguridad o la altura de la ciudad de 2.240 metros sobre el nivel del mar echan para atrás una ambiciosa posibilidad de una NBA que daría una oportunidad a un país vecino como hizo con Canadá en los años 90.

México, por si acaso, ya tiene un equipo en la Liga de Desarrollo de la NBA denominado ‘Capitanes’ y que cuenta con varios exjugadores de la mejor liga del mundo.

La otra opción que maneja la NBA es abrir una franquicia en Canadá, pese al fracaso que en su momento supusieron los Vancouver Grizzlies. Aquel equipo salió tarifando camino a Memphis tras apenas seis temporadas de vida en lo que fue un gran revés para la liga.

Ahora ese proyecto se está retomando, pero sería en la ciudad de Montreal, mucho mejor ubicada para los intereses de la competición que su antecesora y con ganas de fiesta.

Los posibles cambios de Conferencias

El caso es que si la NBA se decanta por la opción Las Vegas-Seattle o México, la liga tendría que mandar a un equipo a la Conferencia Este para equilibrar las dos divisiones. En ese caso, todos los focos apuntan a Memphis cambiando de lugar.

Si, en cambio, fuese una admisión Las Vegas-Montreal, la liga dividiría equipos y no habría cambios en las Conferencias.

En los próximos meses sabremos más información sobre los planes de expansión de una NBA que contempla globalizarse todavía más. La liga sigue sin mirar a Europa y una Euroliga que todo apunta que acabará abrazando los petrodólares de la mano de Dubai.

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