La incomprensible desaparición de Oier Lazkano, la gran esperanza del ciclismo español
El ciclista vitoriano lleva sin competir desde la Paris-Roubaix celebrado en abril y desde entonces no ha entrado en los planes del Red Bull Bora.

Juego Seguro. +18 Juega con responsabilidad.
¿Dónde está Oier Lazkano? Esa es la pregunta que muchos aficionados al ciclismo se llevan haciendo semanas, sin que no haya una respuesta concreta. El ciclista vasco estaba llamado a ser la siguiente gran estrella del ciclismo español en las Clásicas belgas, tras haber cosechado resultados impresionantes en un territorio donde los nuestros no son profetas como los adoquines.
Lazcano despuntó en un equipo poco acostumbrado a ellas como el Movistar, cosechando podios en la Kuurne-Brussel-Kuurne o en A través de Flandes, además de ganar la Clásica Jaén Paraiso Interior a gente como Wout van Aert, Tim Wellens o Michal Kwiatkowski. Todo eso lo consiguió en un 2024 que le sirvió para darse a conocer en el pelotón internacional.
Su nombre empezó a sonar para los mejores equipos del panorama como Red Bull Bora, Lidl Trek o Soudal Quick Step, terminando finalmente en el primero de los candidatos. Movistar también lo intentó retener, pero los millones que los alemanes ofertaron hicieron que la escuadra española no tuviese ninguna opción. Lazkano fichaba por ellos con caché de líder, de estrella, superando los siete ceros su salario.
Un inicio complicado
Oier debutó este año con los alemanes en la Etoile de Bessèges, teniendo que abandonar en la tercera etapa tras perder dos minutos. El ciclista reaparecería a las dos semanas en una prueba de más nivel como la Vuelta al Algarve. Ahí cosechó su mejor puesto de la temporada, siendo decimonoveno en una contrarreloj en la última etapa pero terminando en un discreto puesto 55 en la general.
Empezaba la temporada de Clásicas y como en años anteriores los focos estaban puestos en un Lazcano que quería reeditar éxitos. Su primera aparición fue en la Omloop Nieuwsblad, terminando en el puesto número 128. Al día siguiente, no finalizó la Kuurne-Brussel-Kuurne donde el año anterior había sido tercero. Algo pasaba con Lazcano y el equipo tuvo que tomar la primera decisión complicada.
Le borraron de las siguientes Clásicas belgas, esperando que mejorase su punto de forma pasándose sin competir tres semanas en marzo. “Estuve enfermo, pero ahora creo que estoy mejor tras la concentración en el Teide”, dijo. Reapareció el 26 de marzo en la Classic Brugge-De Panne y cosechó un discretísimo puesto 112. Las dos siguientes carreras, la E3 Saxo Classic y el monumental Tour de Flandes, fueron sendos abandonos para decepción de todos.
Tocando fondo
Lazcano pasó de ser el líder de su equipo a ser el gregario de un semidesconocido como Mick van Dijke. El ciclista correría en el mes de abril dos carreras más, completando unos horribles resultados. Fue el 108 en entrar en la meta del Scheldeprijs y el 117 de la Paris-Roubaix, llegando a meta como el último de la prueba.
Noticias relacionadas
Ese resultado fue la última aparición en competición de un Lazcano que ha cerrado a cal y canto sus redes sociales, y del que poco o nada se ha sabido. Su director de equipo, Patxi Vila, fue preguntado en la Vuelta a España por la situación de un ciclista que cumple medio año sin competir. “No puedo comentar nada por directrices del equipo”, aseveró.
Esas palabras no han hecho más que avivar los rumores sobre la situación de un Lazcano que no tiene previstas más carreras en 2025. Algunos como el polémico Johan Bruyneel, exdirector de Lance Armstrong, creen que se trata de un ‘burn-out’ mental y que no es capaz de lidiar con la presión de ser el jefe de un equipo del nivel del Red Bull Bora. Sea como fuere, lo que es evidente es que lleva medio año sin competir y no hay ninguna explicación al respecto.
Rellene su nombre y apellidos para comentar