La última vez que el Real Madrid o el Barcelona no alcanzaron la final de la ACB, Apple no había inventado el iPhone, Facebook estaba en pañales, Whatsapp no existía, España no había ganado ni un Mundial de Baloncesto ni de Fútbol y hasta todavía se podía fumar dentro de los bares y discotecas de nuestro país.

Fue en junio de 2006 cuando Unicaja y Baskonia se jugaron el título de campeón de la Liga ACB, con una barrida de los andaluces a los vascos por 3-0. Real Madrid y Barcelona se ausentaron de la lucha por el título y desde entonces siempre uno de los dos ha estado presente durante 17 años.

No en vano, la final entre blancos y culés se ha producido en los últimos tres años y en esa muestra de tiempo 13 de 17 temporadas con Baskonia -en tres ocasiones- y Valencia -en una- usurpando el puesto a uno de los grandes.

Es lógico que en las ediciones de la Copa del Rey todas las aficiones vayan contra estos dos colosos porque su dominio del baloncesto patrio es poco menos que abrumador.

En Grecia es peor

Hemos querido analizar otras grandes ligas del continente en busca de situaciones de dominio similares y lo cierto es que hay otras ligas que están mucho ‘peor’ que la nuestra. En Grecia, sin ir más lejos, Olympiakos o Panathinaikos han pisado la final ininterumpidamente desde la temporada 1990/91, cuando Aris y PAOK se midieron en la que fue conocida como la final de ‘Salónica’.

Desde entonces, los equipos de Atenas han tenido el dominio de la Liga sin excepciones. Solamente el AEK en 2002 -aunque también es de Atenas- interrumpió la racha de Olympiakos o Panathinaikos como campeón desde 1993 siendo ésta una de las rivalidades más espectaculares del Viejo Continente.

En Turquía, Fenerbahce y Anadolu Efes han sido tradicionalmente los equipos más dominantes de la competición. Uno de los dos han estado en la final siempre desde la temporada 2012/13, cuando fueron sorprendidos por Galatasaray y Banvit en un duelo inédito en el partido por el título. Para encontrar la otra final sin ellos por el título hay que remontarse a la temporada 1989/90.

No rinden como en Euroliga

Siguiendo el rastro de los grandes clubes de Euroliga, vemos que el onmipresente Maccabi Tel Aviv en Israel es mucho más mortal de lo que la gente se puede pensar cuando juega en su país. El equipo que disputa sus partidos en la Mano de Elías se ha perdido cuatro de las últimas 10 finales disputadas en la Ligat ha’Al, algo que pone en valor el nivel de dicha competición.

En Rusia, encontramos que el CSKA ha visto interrumpido su dominio esta misma temporada después de no haber fallado a una sola final de la VTB United League desde que se fundó en 2008.

En la Liga Adriática -donde juegan los mejores equipos de los balcanes- vemos que el Estrella Roja de Belgrado lleva apareciendo en ocho finales consecutivas siendo el equipo más dominante de la competición por delante de ‘ogros’ como Partizan, Split o Cibona.

En Italia, la situación es más complicada de explicar porque no existe un gran equipo dominante como tal, sino que se han dado periodos de esplendor puntuales de clubes que luego se sumieron en enormes crisis económicas. Quizá el que mayor reflejo de equipo dominante puede dar es un Olimpia Milán que ha alcanzado las últimas tres finales de la competición de forma consecutiva.

Se da la casualidad de que el dominio continuado de Madrid y Barcelona en la ACB, así como el de Olympiakos y Panathinaikos en la A1 Ethniki, sucede gracias al apoyo de sus clubes de fútbol, quienes en un determinado caso sacrifican una parte de su presupuesto para mejorar estos equipos y mantener una tradición que difícilmente parece alterable.

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