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España ya ha dado su once titular de estadios para el Mundial de 2030. Con el Santiago Bernabéu como cabeza de cartel y previsible sede de la final del evento, la Federación Española de Fútbol anunció también una serie de ausencias dolorosas que han provocado un sinfín de comentarios y hasta comunicados oficiales de los afectados.

Madrid tendrá dos sedes con el Santiago Bernabéu y el Metropolitano, hogar del Real Madrid y el Atlético, respectivamente. Barcelona, por aquello de los equilibrios políticos, también contará con el Camp Nou y el Estadio Cornellà-El Prat, lugar donde habitualmente juegan Barcelona y Espanyol.

La cosa se complica con las siete sedes restantes. El País Vasco aporta San Mamés y Anoeta, las casas de Athletic y Real Sociedad, con dos estadios recién reformados. Andalucía pone otras dos con La Cartuja y La Rosaleda. Tanto el recinto sevillano como el malagueño han acogido muchos eventos de la RFEF en los últimos años y han querido premiarles con ello.

De los tres que faltan, dos de ellos pertenecen a equipos de Segunda División. Hablamos de La Romareda de Zaragoza y de Riazor en La Coruña. El tercero en discordia es el estadio de Las Palmas.

No habrá paella en el Mundial

Lo más llamativo es que la Comunidad Valenciana se ha quedado fuera totalmente del reparto del Mundial 2030. Todo el mundo hablaba de que el Nuevo Mestalla podía ser una de las sedes, pero las dudas sobre su construcción -paralizada desde 2009- han hecho que no forme parte de la candidatura.

Tampoco han tenido en cuenta que el Viejo Mestalla es uno de los mejores estadios de España y que fue sede del Mundial en 1982. Además, el estadio de la Cerámica en Vila-Real también se ha quedado fuera de la pugna, pese a haber acogido encuentros de Champions League en los últimos años.

Las rarezas que pasan en Sevilla

La capital andaluza tendrá en La Cartuja su sede, pero muchos creen que eran mejores candidatas el Benito Villamarín del Betis y el Sánchez Pizjuán del Sevilla FC. Los dos estadios quedaron descartados, pese a que el primero está recién reformado y el segundo acogió recientemente la final de la Europa League.

En la decisión de la Federación ha pesado y mucho que La Cartuja haya sido el estadio de emergencia empleado por el ente para todo tipo de eventos, como finales de Copa del Rey o la Supercopa de España. Además, acogió partidos de la Eurocopa 2020 y también otros encuentros de la selección española, pese a lo incómodo de sus instalaciones y una inoportuna pista de atletismo.

Otras sedes que sonaron

Entre los lugares que han quedado descartados llama la atención que Vigo con Balaídos estuvo en muchas quinielas quedando finalmente fuera. Lo mismo se puede decir de El Molinón en Gijón o de La Nueva Condomina en Murcía. Ambas localidades pugnaron, pero finalmente los gastos de reforma en el estadio pusieron el freno de mano en su candidatura a estar en el Mundial 2030.