Llegó el día. Este jueves 12 de octubre se ha hecho oficial el próximo destino de ‘MM93′: el equipo Gresini Racing. Una decisión con la que el octocampeón del mundo rompe lazos con Repsol Honda tras once años de relación en MotoGP.

Un desenlace del que ya se hablaba tras la temporada 2022 y que el propio ‘93′ confirmó que ocurriría antes del GP de Japón. Un cambio de aires condicionado por varios factores.

“Reencontrar la ilusión”

Una de las claves de la marcha del piloto catalán del equipo Honda ha sido su necesidad de volverse a ilusionarse subido a una moto, tal y como ha explicado en la rueda de prensa previa al GP de Indonesia: “necesito reencontrar la ilusión, de lo contrario no tiene sentido seguir adelante”.

Esta ha sido una decisión muy complicada, en la que ha priorizado su carrera deportiva. “Romper once años de relación con Honda, con muchos éxitos en este periodo, ha sido muy difícil”. Sin embargo, según ha afirmado, “los últimos cuatro años he sufrido mucho y no he disfrutado”.

Un hecho que le ha condicionado a la hora de dejar atrás a la que hasta ahora ha sido su única familia en su etapa en MotoGP con el objetivo de revivir sensaciones perdidas. “Si sonrío dentro del casco, que es lo que busco, todo vendrá rodado”.

La decadencia de Honda

Aunque su estancia en Honda le han traído numerosos éxitos, el dominio que venía plasmando el equipo durante la última década ha pasado al olvido.

En los últimos dos años, ‘El trueno de Cervera’ ha sido incapaz de ganar una carrera y tan solo se ha subido al podio en dos ocasiones. Un hecho se ha encargado de hacer patente durante la rueda de prensa tras el anuncio de su salida de Honda.

Este motivo también ha sido crucial en su decisión, puesto que lo que también busca con su marcha es: “volver a verme competitivo, que no significa ganar sí o sí, sino volver a estar delante”.

Un deseo que a día de hoy parece lejano que pudiese lograr con Honda, que desde los test de pretemporada mostró un rendimiento muy pobre. Una situación que no ha logrado revertir, ya que es el equipo que menos puntos ha sumado este año:

Aunque el piloto ha dejado las puertas abiertas para un posible regreso a Honda, ya que para el “no es un adiós, es un hasta luego. Más tarde o más temprano, pero es un hasta luego”.

Un confidente en Gresini Racing

Sin duda, su hermano ha sido un punto de apoyo de cara a la elección de su próximo equipo. Aunque también han sido esenciales las facilidades que le han dado para tomar esa decisión.

En primer lugar, el octocampeón del mundo recibió “buenas críticas” por parte del que será de nuevo su compañero de equipo el próximo año. Aunque la responsabilidad de abandonar un peso pesado para competir por un equipo pequeño ha sido del ‘93′.

Sin embargo, este movimiento hubiese sido muy difícil de no haber sido por la flexibilidad que le ofrecieron desde Gresini: “Me dijeron: ‘Nosotros decidimos esperarte y te damos todo el tiempo que quieras’. Y esto me ayudó muchísimo”.

Además, tan solo ha firmado un contrato de un año porque no quería “estar atado a nada, pues no sé qué es lo que va a pasar en el futuro”. Una decisión tomada con vistas al futuro, ya que probablemente busque un movimiento en 2025 para sentarse en una Ducati oficial.

¿Cuándo debutará en Gresini Racing?

Según adelantó el medio especializado Motorsports, la primera vez que veamos a ‘MM93′ montado en la Ducati del equipo Gresini será el martes 28 de noviembre. Dos días después de la disputa del último Gran Premio de MotoGP 2023.

El catalán tomará las riendas de la Desmosedici GP22 en el primer test de pretemporada 2024, que se celebrará en el GP de Cheste.

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