Estamos asistiendo al comienzo de una nueva era en el fútbol. Cada gol, cada celebración, cada falta, cada lesión, cada asistencia médica... todo quedará apuntado para cuando se alcance el minuto 45 y el cuarto árbitro levante la tablilla. Será prácticamente imposible encontrar un partido por debajo de los dobles dígitos de adición.

En esta primera fecha del campeonato hemos llegado a tener descuentos de casi media hora, pero, ¿realmente ha tenido algún efecto? ¿Hay más goles? ¿Más juego efectivo?

Dos panoramas diferentes

En la temporada 22/23, los tiempos de añadido en LaLiga tuvieron una línea continuista respecto a años anteriores. Partidos con solo seis o siete minutos de compensación, algo impensable en la actualidad.

Así fue la primera jornada de la anterior campaña en Primera División. Los resultados, los minutos de descuento totales entre primera y segunda parte y todas las incidencias notables que tuvieron lugar durante el tiempo extra:

En total, 110 minutos de descuento entre los diez primeros partidos de la temporada. El pasado curso, el tiempo de juego real fueron 53:41 minutos por partido, cuando la media de duración de los encuentros se situó en 98:16 minutos.

Por el contrario, en la primera fecha de la temporada 23/24, los minutos de descuento se han extendido hasta 149 (+ 39).

Mismo número de goles

Uno de los propósitos de estos nuevos tiempos de descuento es crear más tiempo con el balón en movimiento y, en consecuencia, ver más goles y tratar de ajustarse lo más posible a la realidad de lo que serían los noventa minutos de un partido.

De momento, LaLiga no lo ha conseguido. La primera jornada de la temporada 22/23 registró el mismo número de goles que en el curso 23/24, un total de 21.

La única diferencia es que, en la campaña anterior, dos de las dianas llegaron en tiempo de recuperación, mientras que, en la actual, se convirtieron tres goles en periodo de alargue.

Una medida que sigue sin funcionar

El Getafe - FC Barcelona está en boca de todos. El colegiado añadió diez minutos en la primera parte y nueve en la segunda, aunque un posible penalti y su consecuente comprobación por parte del VAR alargó ese tiempo añadido hasta casi dieciséis minutos.

En total, según datos de OPTA, se jugaron 115:54 minutos, pero el tiempo efectivo se redujo a 60:49. No hubo goles, pero sí se repartieron nueve tarjetas amarillas y tres rojas -incluyendo la del técnico del Barça-, además de la mencionada revisión por parte de la tecnología.

La vez anterior que el Barça había visitado el Coliseum Alfonso Pérez, el partido también finalizó con 0-0 y se añadieron un total de cinco minutos, veintiuno menos que la presente temporada. En aquella ocasión solo hubo tres tarjetas amarillas y ninguna incidencia más.

¿Cuánto se ha añadido en Inglaterra y Francia?

En la Premier League, el tiempo de recuperación fue ciertamente inferior: 127 minutos. Si lo dividimos entre los diez partidos, tenemos una media de 12,7 minutos de descuento en cada uno. El Newcastle - Aston Villa, que terminó 5-1, se llevó la palma con 19 minutos recuperados. Sin embargo, se queda lejos del Coliseum Alfonso Pérez.

En lo que respecta a la Ligue 1, la media se eleva hasta los 14,3 minutos de compensación. En total hubo 129 minutos recuperados en nueve partidos, pues la liga francesa solo cuenta con 18 equipos a partir de ahora. El Clermont - Mónaco (2-4), lideró con 22 minutos, mientras que el PSG vs. Lorient (0-0) fue el único que se quedó por debajo de los dobles dígitos (8′).

Juego Seguro. +18 Juega con responsabilidad.