Diario As
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

VUELTA ESPAÑA

Ni Roglic podrá batir el increíble récord de Freddy Maertens en la Vuelta a España

El ciclista belga sólo corrió una vez la Vuelta a España en toda su trayectoria, en el que estableció una serie de récords sin parangón.

Ni Roglic podrá batir el increíble récord de Freddy Maertens en la Vuelta a España

Juego Seguro. +18 Juega con responsabilidad.

Hubo un tiempo en que las Grandes Vueltas apenas tenían dificultades montañosas. En 1977, en el periodo de entreguerras del dominio de Eddy Merckx y Bernard Hinault, Freddy Maertens protagonizó una de las actuaciones más portentosas de la historia del ciclismo, ganando la Vuelta a España de ese año con 2:51 de ventaja sobre Miguel Lasa y 3:23 sobre el alemán Klaus-Peter Thaler.

Puede que esas diferencias en la general no sean llamativas para nadie, pero lo que sí fue increíble fue que Freddy Maertens ganó 13 de las 19 etapas que se disputaron en esa Vuelta a España. Logró un hito al que nadie se ha acercado nunca en la historia y que parece hasta imposible de batir si Tadej Pogacar o cualquier leyenda se empeñase en intentarlo.

El belga obtuvo en su carrera la friolera de 221 victorias de etapa, siendo conocido por ganar muchas etapas al sprint o en grupos pequeños. Maertens pasaba grandes apuros en la montaña por sus condiciones físicas de clasicómano, pero en 1977 se le plantó una oportunidad dorada en una Vuelta a España que apenas tenía tres jornadas con dificultades montañosas.

En la actualidad, las tornas han cambiado y abudan más las llegadas en alto o con dificultades montañosas que los sprints. De hecho, en la presente edición de la Vuelta a España apenas hay tres finales que son propicios para los velocistas, cimentándose claramente este cambio de tendencia. En los 70, en cambio, la tónica era que hubiese un mínimo de 10 etapas que terminaban al sprint.

Dominio de principio a fin

El corredor se plantó en la salida Dehesa de Campoamor, ganando el prólogo inicial de 8 kilómetros y no soltando el maillot de líder hasta la última etapa -con llegada en Miranda de Duero-. Por supuesto, Maertens ganó la primera y la última etapa de la Vuelta a España, siendo este una muestra del dominio que ejerció en la prueba que al año siguiente sería ganada por un jovencísimo Bernard Hinault.

Maertens se encumbraría en las tres primeras etapas de la carrera y luego enlazaría una increíble racha de victorias, ganando de la quinta a la novena sin dejar escapar ni un sólo sprint. El belga tenía dominadas todas las clasificaciones de la prueba, salvo la montaña, ganando el maillot por puntos duplicando al segundo clasificado y también llevándose las metas volantes hoy extintas.

El ciclista, que por aquel entonces tenía 26 primaveras, hizo otra hazaña en un tipo de etapas que hoy también abundan poco. La undécima de esta Vuelta a España estaba dividida en dos sectores disputándose primero una contrarreloj por Barcelona y luego una etapa en línea. En ambas, Maertens salió victorioso, obteniendo una enorme renta antes de las etapas de montaña que subieron como etapa reina a la estación de Formigal.

No pudieron con él

El corredor del equipo Flandria-Latina sobrevivió a todos los ataques e incluso a una alianza de ciclistas españoles, que buscaron por todos los medios arrebatarle el liderato, terminando seis de ellos en el top-10 de la clasificación. Maertens es el último sprinter que ha ganado una Gran Vuelta después de esto y su récord de mantiene intacto como algo imposible de alcanzar.

El ciclista fue dos veces campeón del mundo en ruta, ganó 15 etapas en el Tour de Francia y 7 en el Giro de Italia (curiosamente también 1977), pero para todos quedará en el recuerdo que en su única participación en la Vuelta a España hizo una exhibicación sin parangón con 13 victorias. Maertens ha pasado a la historia como el hombre que hizo la Vuelta a España perfecta.

Normas