NBA
Nueva York se acerca a la peor sequía deportiva en 100 años
La capital del mundo, acostumbrada a constantes alegrías, vive sus años más tristes desde comienzos del siglo XX. La derrota de las Liberty en las finales de la WNBA significó otro varapalo más.
Nueva York, además de ser conocida como la capital del mundo, también ha sido durante muchos años el epicentro del deporte. Pelé eligió el Cosmos para retirarse, los Yankees ganaban Series Mundiales como churros e, incluso, hasta los Knicks fueron capaces de hacerse con dos anillos.
Pero aquellas épocas doradas han dado paso a tiempos más oscuros. La afición sigue llenando el Madison Square Garden o el MetLife Stadium, pero los resultados son aciagos, más teniendo en cuenta la dimensión que supone Nueva York y la historia que tiene detrás.
Entre los cuatro principales deportes del país, Nueva York no gana un título desde 2012.
Las New York Liberty se quedaron a un paso del título
El baloncesto femenino ha crecido de manera exponencial en el país de las barras y las estrellas durante los últimos años.
Después de varias temporadas en la trastienda de la competición, sin plantilla para competir por el título, las Liberty tenían este año marcado en rojo en el calendario. El cuadro neoyorquino cuenta desde 2020 con la número 1 de aquel draft y, en febrero, se hicieron con los servicios de la mejor jugadora disponible entonces en la agencia libre.
Pero no ha podido ser. Las Vegas Aces cumplieron con los pronósticos y salieron campeonas después de cuatro partidos. El último, en el Barclays Center, se decidió de forma dramática por 69-70.
Las Liberty nunca han ganado la WNBA, pero muy mal se les tendría que dar para no estrenarse en las próximas temporadas.
El fútbol americano trata de salvar los muebles
Nos referimos a los New York Giants, evidentemente. Los G-Men ganaron la SuperBowl por última vez en 2012, frente a los New England Patriots, gracias a un touchdown cuando restaban 59 segundos para el final.
Antes, los Big Blue habían capturado el trofeo Vince Lombardi en 1987, 1991 y 2008.
Pero las últimas once temporadas han sido de todo menos satisfactorias para los neoyorquinos. Únicamente se clasificaron para playoffs en dos ocasiones y, después de que la campaña pasada fuera un enorme paso adelante, este curso se encuentran colistas de su división con un récord de 1-5-0 y una plaga de lesiones.
De todas formas, peor le ha ido a los New York Jets. Su historia, llena de mala suerte, se puede resumir con lo que les ha pasado este año. Firmaron a A-Rod, el histórico quarterback de los Packers, que se lesionó en la cuarta jugada de la temporada. Ahora, los Jets son cuartos en la AFC East (3-3), aunque la misión de quedar por delante de Dolphins y Bills es casi imposible.
El conjunto verde solo tiene una SuperBowl en su poder, la que ganó en el año 1969 a los Baltimore Colts por 16-7.
No obstante, los Jets no se clasifican para playoffs desde 2010 y solo han luchado por el título en 13 de las últimas 54 temporadas.
Los Knicks no han sido competitivos en todo el siglo XXI
Al principio de la década de los 70, los Knickerbockers ganaron sus dos únicos anillos y, en los 90, pudieron ampliar ese palmarés, pero cayeron en las Finales de la NBA ante los Houston Rockets (1994) y los San Antonio Spurs (1999).
Desde entonces, los neoyorquinos han vagado sin pena ni gloria por la mejor liga de baloncesto del mundo. En 2015, durante una de las muchas temporadas de transición, se hicieron virales las imágenes de cinco aficionados con bolsas de papel en la cabeza a modo de protesta por el mal presente que atravesaba el equipo.
Los Knicks ganaron una ronda de playoffs el pasado mes de abril por primera vez en una década, pero siguen muy lejos de ser favoritos al título.
Donde estaban depositadas muchas esperanzas era en los Brooklyn Nets, que consiguieron confeccionar una plantilla de estrellas, pero el sueño se desvaneció rápidamente. Las lesiones y las salidas precipitadas de sus mejores jugadores alargaron la agonía de una franquicia que jamás, ni siquiera cuando estaba en Nueva Jersey, ha ganado la NBA.
¿Qué le pasa a los Yankees?
Es el club más laureado de Nueva York, así como de Estados Unidos. A lo largo de la historia han ganado 27 Series Mundiales, pero la 28 se resiste.
En 2017, estuvieron a un partido de llegar a la batalla por el título. Perdieron en la ALCS frente a los Houston Astros, su bestia negra en los últimos años. No obstante, tiempo después salió a la luz que la franquicia tejana había estado involucrada en un robo de señales durante los partidos, aunque las consecuencias fueron muy laxas y, como era de esperar, los Yankees no obtuvieron ningún beneficio.
La mala racha del equipo no se debe a problemas financieros. En 2023, tuvo el segundo payroll -nóminas- más alto de la MLB (276.999.872 $), justo por detrás del otro equipo de la ciudad, los Mets, con 353,546,854 $.
De nuevo, las lesiones y unas cuestionables decisiones deportivas por parte del General Manager han tirado a la basura otro año más en el Bronx. Y no están para desperdiciar absolutamente nada, porque en la plantilla gozan del mejor pitcher de la Liga Americana -y probable ganador del Cy Young- y el MVP de la temporada 2022.
El último título de los Yankees fue en 2009. Es la tercera peor racha en la historia de la franquicia, que también estuvo sin ganar de 1903 a 1922 y de 1979 a 1996. Además, en 2023 han firmado el peor récord (82-80) desde 1992 (76-86).
Si las cosas van mal en los Yankees, peor es en los Mets. Los de Flushing Meadows no ganan las Series Mundiales desde 1986 y jamás han participado en la postemporada durante más de dos años consecutivas.
Este curso, todo hacía indicar que la cosa era diferente, pero no. Uno de los grandes agentes libres que había en el mercado había firmado con los Mets por 12 años y 315 millones de dólares, aunque ese contrato se rompió porque el puertorriqueño no superó los exámenes físicos.
Pese a todo, los Mets fueron el equipo más caro en la historia del béisbol, pero mal confeccionado. Malos números desde el bullpen, sobre todo por la lesión de su cerrador, y estadísticas por debajo de las expectativas en sus mejores jugadores terminaron por enterrar uno de los años más prometedores en Citi Field.
El hockey sobre hielo puede ser la solución
En 2014, los New York Rangers -uno de los seis fundadores de la NHL- alcanzaron la final por la Stanley Cup, pero cedieron por 4-1 ante Los Angeles Kings. Tres de las derrotas llegaron en la prórroga y la suerte, claramente, no estuvo del lado de los neoyorquinos.
La última vez que los Blueshirts se proclamaron campeones fue en 1994. Mucho antes, habían logrado sus tres primeros títulos en 1928, 1933 y 1940. No obstante, ahora existe la esperanza de que esa sequía pueda finiquitarse.
Los Rangers cambiaron de inquilino en su banquillo este verano con el objetivo de hacer funcionar mejor las grandes piezas que ya tiene en su plantilla. En 2022, perdieron en las Finales de Conferencia ante los Tampa Bay Lightning (4-3) y, la temporada pasada, sucumbieron ante los vecinos, los New Jersey Devils, de nuevo en siete partidos.
El hockey sobre hielo está muy abierto en lo que opciones al título se refiere, por lo que no es descartable que los Rangers sean capaces de acabar con la escasez de títulos que hay en Nueva York.
También podrían hacerlo los New York Islanders, que en 2021 perdieron la final de la Stanley Cup en siete partidos contra los Tampa Bay Lightning. Los de Elmont, que ganaron cuatro títulos seguidos entre finales de los 70 y principios de los 80, no han vuelto a tocar el cielo.
La falta de regularidad en los resultados es lo que está matando las posibilidades del cuadro naranja. Al año siguiente de perder la mencionada final contra los Lightning, ni siquiera se clasificaron para playoffs.
La MLS brindó el último título a la ciudad
El fútbol está tomando cada vez más dimensión en Estados Unidos, aunque sigue lejos de los deportes principales. No está entre el Big 4.
En 2021, el New York City FC se coronó campeón de la MLS tras derrotar en los penaltis a los Portland Timbers (4-2). Por primera vez en la historia, un equipo de la ciudad que nunca duerme ganó la liga de soccer -como lo llaman allí-, pero, ni de lejos, causó el furor de otras disciplinas. De hecho, para muchos aficionados, la sequía en cuanto a títulos deportivos sigue vigente desde 2012.
Los New York Red Bulls habían concentrado históricamente la afición al balompié en Nueva York, pero sin títulos. Debutaron en la MLS allá por 1996 e, incluso, tienen en sus vitrinas varias Supporters Shields -trofeo que se le da al mejor clasificado durante la temporada regular-, si bien no han podido rematar la tarea.
En 2003 -bajo el nombre de MetroStars- y 2017 fueron finalistas, aunque se toparon con Chicago Fire y Sporting Kansas City, respectivamente, que aguaron la fiesta a los neoyorquinos.
¿Cuándo se acabará la sequía?
Como ya mencionamos anteriormente, las New York Liberty y los New York Rangers parecen las dos franquicias más cercanas a organizar una rúa por las calles de la ciudad, aunque lo que hace falta son más hechos y menos palabras.
En resumen de todo lo anterior, estas son las cifras generales de cada franquicia en lo que a éxitos se refiere:
Desde 1905, cuando los extintos New York Giants ganaron las Series Mundiales a los Philadelphia Athletics, hasta 1921, año en que esa misma franquicia repitió título, pasaron 16 años. Es el peor lapso de tiempo en cuanto a alegrías deportivas en la historia de Nueva York. No obstante, en aquellos tiempos, la ciudad no gozaba de una oferta de equipos tan amplia como ahora.
A día de hoy, con hasta diez conjuntos entre los cinco principales deportes, Nueva York solo ha celebrado un título en los últimos 11 años y cinco en lo que llevamos de siglo.
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