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El fútbol mundial le debe muchísimo al Santos. Este histórico equipo brasileño ha vivido un particular apocalipsis después de la pandemia. El club vio morir a su máximo referente histórico, Pele, a finales de 2022 y justo un año después descendió por primera vez en su historia al Brasileirao B poniendo fin a 111 años ininterrumpidos en la máxima categoría.

El club ha estado purgando las penas en este 2024, tirando de su rica e histórica cantera para salir del pozo. Este club ha dado a conocer al mundo a algunos de los mejores jugadores de toda la historia como el mencionado Pelé, pero también a figuras destacadas del ayer y hoy como Neymar, Coutinho, Robinho, etc.

No es de extrañar que, cuando en 2023 se consumó su descenso del Santos en la última jornada del Brasileirao de forma dramática, las redes se inundasen de mensajes. El equipo se marchó a la B tras encajar un gol en el minuto 96 después de un disparo desde el medio campo donde su portero falló con estrépito. Una parte de la historia del fútbol se estaba perdiendo en ese momento.

Se consumó la tragedia

Porque el Santos pertenecía a una estirpe de campeones de la Copa Libertadores -torneo que ha ganado en tres ocasiones- que nunca habían pisado la Segunda División. En Brasil, Flamengo y Sao Paulo son los únicos que compartían ese privilegio con los ‘Peixe’, mientras que en el resto del continente encontramos nombres tan ilustres como Boca Juniors, Colo-Colo, Peñarol, Nacional, Once Caldas, Atlético Nacional y Olimpia.

El Santos vivió momentos muy complicados que incluso llevaron a pensar en la desaparición del club el pasado invierno. El equipo malvendió a sus tres puntales jóvenes a clubes europeos, logrando ingresar por los tres 53 millones -cuando en otra situación hubiese conseguido eso por un sólo jugador-.

El equipo, tirando de la cantera y de algunos de los jugadores más veteranos de Brasil, ha cuajado una temporada muy seria en el Brasileirao B, consiguiendo ascender con varias jornadas de antelación. El Santos ahora espera reactivarse en el mercado de fichajes para no pasar apuros la próxima temporada y muchos sueñan con el regreso del hijo pródigo.

Un sueño y una realidad

Ese retorno no es otro que el de Neymar. El delantero de 32 años sigue siendo un seguidor acérrimo del club y ahora está a punto de quedarse libre después de que su aventura en Arabia Saudí con el Al-Hilal no esté siendo todo lo fructífera que esperaban ambas partes. El jugador regresaría con el reto de darle la cuarta Libertadores a un club con el que ya la levantó en 2011.

Precisamente en ese año ocurrió un hecho muy similar al acontecido con Santos y que fue el que llevó a River Plate por primera vez a la B en Argentina. El histórico club consiguió resurgir de sus cenizas, como ahora pretenden los brasileños, regresando inmediatamente a la máxima categoría y ganando la Libertadores en 2015. No hay mejor espejo al que mirarse.

El Santos, qué duda cabe, es uno de los equipos con mayor tradición del fútbol mundial y como su eslogan dice ‘O Maior Brasileiro do Mundo’, la historia volverá a ponerles en su sitio más pronto que tarde. Su cantera sigue siendo la mayor mina de talentos del fútbol carioca y eso siempre es garantía de éxito.