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Checo Pérez ha sido la última víctima del ‘gatillo fácil’ de Red Bull a la hora de ejecutar finiquitos. La escudería energética entró en la Fórmula 1 en 2005 y desde entonces tiene un amplio historial de despidos de pilotos con contrato en vigor.

El equipo austríaco emplea todo tipo de métodos cuando quiere cortar una relación. Son de las pocas escuderías a las que no les importa dar una indemnización, tampoco les tiembla el pulso si hay que relegar a un piloto al equipo filial e incluso lo ha hecho a mitad de temporada. Vamos a repasar algunos de los casos más destacados:

Vitantonio Liuzzi

El italiano fue relegado en la primera temporada de Red Bull en la Fórmula 1 tras cuatro carreras.

En realidad, él y su compañero, Christian Klien, competían por un asiento turnándose en las carreras. El austríaco corrió las tres primeras y el transalpino las cuatro siguientes.

Red Bull se decantó por dejarle a Klien el volante durante el resto de esa temporada y parte de la siguiente.

Christian Klien

Este piloto fue despedido por Red Bull a tres carreras del final de la temporada 2006 para dar paso al holandés Robert Doornbos.

Klien no volvería a pilotar en un Gran Premio de Fórmula 1 hasta 2010, cuando formó parte del extinto equipo Hispania en las dos últimas carreras de la temporada.

Cosechó un vigésimo y un vigésimosegundo poniendo punto y final a su carrera en el ‘Gran Circo’.

Robert Doornbos

El sustituto de Klien tuvo tres opciones y falló en todas, consiguiendo un duodécimo puesto como mejor resultado.

Red Bull le sustituiría por Mark Webber, estableciendo los primeros cimientos de la futura dinastía del equipo a partir de 2010. Doornbos, tras su pobre desempeño, tampoco volvió a encontrar un volante en la Fórmula 1, aunque tuvo el consuelo de ser jugosamente indemnizado.

Red Bull se lo pensaría a partir de entonces más para ejecutar un despido.

Daniil Kvyat

Tuvo que pasar una década para ver otro golpe de timón en Red Bull y la víctima fue Daniil Kvyat.

El piloto ruso fue sustituido en la cuarta carrera de la temporada por un entonces jovencísimo Max Verstappen, siendo relegado a la escudería suplente Toro Rosso.

Como colofón a aquella decisión, el holandés hizo historia ganando en su debut con Red Bull en el Gran Premio de España de 2016.

Pierre Gasly

El actual piloto de Alpine tuvo en sus manos el Red Bull de 2019 tras apenas haber competido una sola temporada en Fórmula 1.

Tenía la presión de sustituir a un Daniel Ricciardo que había salido por diferencias graves con Verstappen. El francés fue un canapé para el cuatro veces campeón del mundo y la escudería le mandó a Toro Rosso tras 10 carreras en las que no consiguió ni un podio.

Alex Albon sería ascendido desde el equipo filial.

Alex Albon

El tailandés llegó a mitad de la temporada 2019 y cumplió bastante bien, firmando un contrato de larga duración con Red Bull.

Su rendimiento, sin embargo, decayó en 2020, siendo reemplazado a final de año por Checo Pérez y quedándose fuera de la parrilla de 2021 -al ser designado como probador de la escudería austríaca-.

El piloto se liberaría al año siguiente, fichando por Williams donde se encontrará la próxima temporada con Carlos Sainz.

Checo Pérez

El mexicano no sigue en Red Bull tras una segunda parte de 2024 para olvidar.

El piloto renovó en primavera hasta 2026, pero sus pobres resultados en este final de temporada han sido su final.

Los austríacos tendrán que desembolsar una cantidad próxima a los 15 millones en forma de indemnización para anular el contrato del mexicano y dar paso a otro de sus jóvenes talentos.