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Un clausulazo en el último día del mercado revolucionó el fútbol español el verano de 1997: el fichaje de Rivaldo por el Barcelona. El brasileño triunfó en el equipo culé, se coronó Balón de Oro en 1999 y terminó siendo campeón del mundo con Brasil.

Él fue la cara de una moneda que en su cruz tenía al Deportivo de La Coruña. La afición blanquiazul no perdonó la marcha de su ídolo, que 27 años después ha contado a Betfair los secretos de la operación y las motivaciones que le llevaron a decantarse por el Barcelona. Pero antes, vamos a recordar el contexto de aquel fichaje.

El rombo mágico de Lendoiro

Augusto César Lendoiro, presidente del conocido como Super Depor, había logrado reunir en A Coruña al rombo mágico del Palmeiras brasileño: Flavio Conceicao, Djalminha, Rivaldo y Luizao. La ciudad herculina soñaba con una temporada 1997-98 llena de éxitos.

Las expectativas se refrendaron en un torneo Teresa Herrera en el que el Deportivo se impuso a Botafogo y PSV Eindhoven. Fueron dos partidos de pura magia en los que Rivaldo y Djalminha hicieron levantar al público de sus asientos.

Pero lo que no sabía la afición blanquiazul es que ya entonces había irrumpido el Barcelona. La entidad presidida por Josep Lluis Núñez debía dar un golpe de la mesa en el mercado de fichajes tras haber traspasado a Ronaldo Nazário al Inter de Milán

Así que había convencido a Rivaldo y se disponía a pagar su cláusula de 4000 millones de pesetas (24 millones de euros), un año después de que hubiese aterrizado en A Coruña por 1000 millones y de haber anotado un total de 21 goles. Y lo hizo en el último momento, privando al Dépor de su crack sin tiempo para la reacción.

Rivaldo, feliz en A Coruña

Victor Borba Ferreira ‘Rivaldo’ había deslumbrado en Brasil y con 24 años se decidió a dar el salto a Europa. El crack siguió el mismo camino que en su día recorrieron Mauro Silva y Bebeto, cambiando su querida Brasil por la desconocida España:

“Tenía miedo, estaba un poco tenso. Pero en A Coruña me encontré con Mauro Silva y Donato, era un grupo muy bueno. Y después fueron llegando muchos brasileños, así que me sentí muy a gusto”, recuerda Rivaldo.

Aunque le costó adaptarse, el ex del Palmeiras completó una fantástica temporada 1996-97, en la que terminó de explotar de la mano del entrenador brasileño Carlos Alberto Silva. El Dépor había terminado tercero y Rivaldo estaba dispuesto a llevar al equipo al primer puesto en la campaña siguiente.

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Su propuesta para no firmar por el Barcelona

Pero entonces apareció el Barcelona. Sonó el teléfono del brasileño, que en un primer momento se mostró reacio al cambio.

“Me quedé un poco sorprendido. Era el último día del mercado, yo estaba muy contento en A Coruña. Había hecho una gran temporada, iba a empezar mi segunda campaña. Entonces me llamó mi representante para decirme que el Barcelona estaba interesado en ficharme. Recuerdo que yo estaba con Mauro Silva en la habitación.

A mí me entró miedo porque yo estaba feliz en el Deportivo. Me había comprado una casa, me encantaba A Coruña, estaba muy feliz. No quería irme, así que le dije al representante que pidiese el triple de lo que cobraba en el Deportivo para no irme. Él me contestó que sería muy difícil que llegasen a esas cantidades, pero que hablaría con el Barcelona. Yo le dije que no había ningún problema, que yo estaba muy feliz en A Coruña.

El Barcelona gana LaLiga 2024-25 2.75

El Barça acepta y Rivaldo firma

Rivaldo pensaba que había zanjado el asunto, pero nada más lejos de la realidad. Aunque estaba concentrado para la final que disputaría esa noche contra el PSV holandés, una nueva llamada lo cambió todo.

“10 minutos después me volvió a llamar mi representante y me dijo que habían aceptado. Luego me enviaron un documento y yo lo firmé”, asegura el pernambucano.

En el descanso del partido, se empezó a correr el rumor de que la estrella blanquiazul había firmado con el Barcelona, un rumor que pronto se confirmó y que no gustó a los presentes en el Estadio de Riazor.

“La Federación Española había dicho que yo sería jugador del Barcelona a partir del día siguiente. La afición del Deportivo me empezó a abuchear y a llamarme pesetero. Me lanzaron monedas al campo. Fue difícil.

No tuve tiempo para nada, ni siquiera para hablar con mi mujer. Yo no me quería ir, pero ellos aceptaron la propuesta y firmé. Me acuerdo que tomé el avión desde Santiago de Compostela porque no quería ir al Aeropuerto de A Coruña, ya que estaban enfadados conmigo”.

Una elección acertada

El final de la historia ya es por todos conocido. Rivaldo se marchó a Can Barça, donde fue el máximo referente durante 5 años y conquistó 2 títulos de LaLiga... y hoy es una leyenda del fútbol.

“Creo que mi decisión fue la correcta, fui a un gran club como el Barcelona y dos años después fui nombrado el mejor jugador del mundo”, concluye la leyenda en esta entrevista exclusiva para Betfair.