En el mundo de los deportes, habitualmente el continente africano es el que menos peso o relevancia suele tener.

La ausencia de infraestructuras ha condicionado sobremanera las opciones de sus lugareños en una gran variedad de disciplinas, sin embargo, en motociclismo África puede enorgullecerse de tener un palmarés de los más rico gracias a dos países como Zimbabue y Sudáfrica.

Entre los dos suman 14 títulos mundiales de motociclismo, habiendo sido piezas fundamentes del desarrollo y expansión de la competición tal y como la conocemos. No en vano, Sudáfrica acogió el primer Gran Premio en continente africano en 1983 y éste se mantuvo en el calendario hasta el año 2004.

En lo referente a títulos mundiales, llama poderosamente la atención cómo Rhodesia -actualmente Zimbabue- pudo hacerse con hasta ocho Mundiales durante los años 60. Esta lugar -que en aquel entonces pertenecía al Imperio Británico- vio nacer a dos grandes pilotos que dominaron en esa época.

Uno de ellos hizo un histórico doblete venciendo en 350cc y 500cc -las dos cilindradas mayores de la época- conduciendo la mítica MV Agusta en 1961.

Este piloto, por desgracia, fallecería en diciembre de 1962 tras un fatídico accidente en el Gran Premio de Sudáfrica de... ¡Fórmula 1! Sí, se había pasado a las cuatro ruedas tras considerar que las motos eran inseguras.

El otro gran piloto de Rhodesia consiguió hasta cuatro Mundiales seguidos de 350cc entre 1962 y 1965 y además sumó otros dos de 250cc. A diferencia del piloto anterior, este pilotaba una Honda que en esos momentos era una moto poco fiable al venir del entonces exótico Japón.

Sudáfrica tiene una historia más moderna

A Rhodesia le tomó el relevo Sudáfrica con una hornada de pilotos dominantes en los años 70.

En 1978, un piloto de este país se llevó los títulos de 250cc y 350cc en una misma temporada a lomos de una Kawasaki que estrenaba su casillero como motorista. Al año siguiente, repetiría la misma hazaña logrando cuatro títulos mundiales en dos años.

Le tomaría el relevo otro compatriota que en 1980 haría el más difícil todavía ganando el Mundial de 350cc montando una Bimota, una moto artesanal italiana que no volvería a campeonar nunca más pero que era la más bella del paddock. No en vano, estas motos se venden ahora por cantidades impresionantes de dinero.

Finalmente, un piloto que en la actualidad compite en MotoGP dio el sexto título Mundial a Sudáfrica allá por 2016 ganando en la categoría de Moto3.

El país entero se volvió loco con el triunfo de un piloto que no lo tuvo nada fácil para alcanzar la cúspide debutando con las pocos fiables Mahindra indias en el Mundial y luego triunfando con las entonces poco desarrolladas KTM. Curiosamente con esta marca lleva nueve años de matrimonio.

Pocos podrán creerlo, pero el motociclismo en África es una de las categorías donde el continente ha cosechado más éxitos.

Ni fútbol, ni baloncesto, ni tenis ni Fórmula 1, ni golf ni otros tantos deportes han conocido hasta a cinco campeones del mundo de motociclismo distintos provenientes de este continente.

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