Los siete mejores fichajes tapados de la pretemporada

La ventana estival de traspasos 2023 está siendo, para LaLiga, un ejercicio de austeridad. Nada nuevo bajo el sol. El control financiero de la patronal evita grandes dispendios que deriven en grandes deudas. Así que la mayoría de los equipos, los grandes incluidos, caminan con pies de plomo mientras otros campeonatos inyectan ingentes cantidades de dinero en el mercado. Pero que los españoles hayan fichado por ahora con el candado en el talonario, no significa que no hayan fichado bien. Grandes movimientos aparte (Bellingham, Gündogan…), hay algunas incorporaciones de quilates que han pasado inadvertido. Éstos son lo siete fichajes tapados de lo que llevamos de verano.

Caglar Söyüncü y el Atlético de Madrid

En silencio, sin levantar la voz, de los tres grandes de España, el Atlético de Madrid es de los que más y mejor se ha reforzado. Por número. Por calidad de sus incorporaciones. Söyüncü es un buen ejemplo. Central turco de 27 años, está siendo uno de los jugadores más destacados en la pretemporada rojiblanca. Por intensidad, buen juego aéreo y firmeza defensiva. Lo que necesitaba Simeone después de que la temporada pasada, contra natura, el equipo flaqueara especialmente atrás. Los colchoneros lo han incorporado libre desde el Leicester, donde llegó a ganar una FA Cup y una Community Shield. Es de lo poco salvable de los ‘zorros’ tras su descenso en la Premier League. En el Metropolitano dará que hablar.

César Azpilicueta, la extensión del Cholo

César Azpilicueta (33 años) es otro ejemplo de lo bien que se ha movido el Atlético en el mercado estival. Aterriza en la capital de España un año después de que el Barça estuviera a punto de atarlo. Pero aquella operación fue imposible por las limitaciones de azulgrana. Regalo en rojiblanco. Porque apenas llegado a Madrid, se ha mimetizado con el entorno colchonero y el estilo del Cholo como si, en lugar de ser leyenda del Chelsea (508 encuentros en diez temporadas con los blues), lo fuera del Atlético de Madrid. Incrustado en el eje de la zaga o por lo costados, su liderazgo y veteranía imbuyen a los colchoneros un nuevo barniz de solidez como le gusta a Simeone.

Oriol Romeu, el éxito de una crisis

Oriol Romeu (31 años) ha firmado por el FC Barcelona más de una década después de su salida para reemplazar a Sergio Busquets. Palabras mayores. Y pese a la dimensión del reto, este pivote natural de Ulldecona, en Tarragona, no ha hecho más que crecerse en esta pretemporada. Lógico. Es la oportunidad de su vida, ésa que pinto de azulgrana en las inferiores culés hasta que precisamente la competencia de Busquets le hizo imposible asentarse en el primer equipo y tuvo que buscar alternativas en cinco equipos distintos: Chelsea, Valencia, Stuttgart, Southampton y Girona antes de volver a casa poniendo dinero de su bolsillo. Oriol tuvo que abonar unos 500.000 euros de su bolsillo para liberarse del Girona. Lo recuperará con su primer salario. Pero aún así, tal era su deseo de demostrar que puede brillar. En el verano culé, lo está consiguiendo.

Fran García, oxígeno made in ‘La Fábrica’

El Real Madrid acapara titulares mayúsculos en este mercado. Tanto como lo es Bellingham o el codiciado Mbappé. Pero a la sombra de estos titanes ha brillado Fran García (23 años), un fichaje anunciado en diferido (firmó en enero) al que su salida de Valdebebas para hacer la Mili en el Rayo le ha venido de maravilla. A lo Carvajal, pero en zurdo, se ha hecho con el costado izquierdo por sus virtudes (plenitud física, descaro, llegada, intensidad), pero también por las carencias de Mendy. La lesión del francés le hará debutar en Liga con visos de ser un hombre clave para el proyecto merengue en esta 23-24.

Isco, reencuentros en Heliópolis

Isco no es mayor. En absoluto. Sólo tiene 31 años. En el fútbol moderno, una edad ideal. Pero eclosionó tan pronto (ya con 19 años iba repartiendo lecciones de magia en el Málaga), que ha sufrido un desgaste exagerado. Tampoco le ha ayudado su actitud (él mismo lo ha reconocido) en esa trituradora competitiva que es el Real Madrid. Así que su fichaje por el Betis se ve como el último tren para demostrar que la élite le sienta bien. Manuel Pellegrini le ha acogido con los brazos abiertos para intentar recuperar precisamente aquella fantasía que él mismo le exprimió en la Rosaleda. En Heliópolis confían, aunque sea sólo por demostrarle al eterno enemigo, el Sevilla, que ellos sí sabrán hacer del mediapunta la estrella que no consiguieron hacerle en el Pizjuán.

Larin, pólvora canadiense

En la zona baja de la tabla es donde más ebullición de mercado se ha producido. Y entre los movimientos destacados, el de Cyle Larin. Este canadiense de origen Jamaicano (28 años) fue una de las sensaciones del pasado mercado invernal. Al Valladolid no le sirvió para rescatarle del descenso, pero sus ocho goles en apenas 19 encuentros (casi a gol cada dos partidos) fueron argumento suficiente para que media Primera intentara su fichaje. Se llevó el gato al agua el Mallorca del veterano Javier Aguirre, experto en exprimir rendimientos, especialmente de sus delanteros. Que se lo digan a Muriqi. Ambos conformarán una delantera exótica… pero peligrosa.

Blind, impacto en Girona

También en la zona baja ha sido llamativo el fichaje de Daley Blind por el Girona. A sus 33 años, este zaguero neerlandés aterriza en Montilivi con un currículum de gigantes a sus espaldas. Se crio en las inferiores del Ajax, donde su padre fue leyenda, para después jugar en el United, de nuevo en el Ajax (en 2019 rozó la gesta de jugar la final de la Champions tras humillar, entre otros, al Real Madrid) y el Bayern de Múnich. Sin apenas protagonismo en Baviera, su paso atrás para potenciar al Girona hará de la zaga catalana un muro más seguro. Será interesante ver como marida con Míchel, un técnico muy del estilo que gusta por la escuela holandesa.

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