Sorloth, Julián y nueve más

El Atlético de Madrid no ha terminado estando a la altura esta temporada de sus expectativas. Tras un verano de muchas y caras inversiones, al conjunto rojiblanco se le pedía que, por lo menos, compitiera por los títulos (lo hizo hasta marzo). Sin embargo, pese a que terminó la primera vuelta como campeón de invierno, la segunda parte de la temporada ha condenado a un equipo hecho para pelear hasta el final. De lo único que puede sacar pecho el cuadro rojiblanco es de haber fichado muy bien en ataque este verano. Una sociedad creada entre Julián Alvarez y Sorloth que espera darle muchas alegrías al cuadro rojiblanco en años venideros.

Julián - Sorloth, una sociedad letal

Con las llegadas del argentino y del noruego, el conjunto del Cholo Simeone firmaba mucho gol. Sin embargo, ni el aficionado colchonero más optimista, podría imaginarse los registros que han rubricado en su primer año. Además, con el mérito de que el ex del Villarreal apenas ha disputado 20 partidos como titular entre todas las competiciones, 15 de ellos en Liga. Sobre el ex del Manchester City sí que se esperaba un gran rendimiento. Aún así, finalmente, el “19″ ha superado las expectativas, firmando la temporada más goleadora de su carrera.

Tan buena ha sido la adaptación de ambos, que eso le ha permitido al club tener en su plantilla a una de las sociedades más goleadoras de la última década del conjunto madrileño. Entre los dos, han anotado casi la mitad de los goles de toda la temporada sumando las tres competiciones. De los 109 que ha festejado el equipo de Simeone, 29 han sido obra de Julián y 24 del noruego. 53 goles que han representado casi un 50% de los goles rojiblancos. Por detrás, Antoine Griezmann, que tras una segunda vuelta para olvidar, ha terminado el año con 16 goles. Lejos de un Alexander Sorloth que le ha adelantado por la derecha en el último tramo de la temporada. Ya el siguiente en la lista ha sido Correa, con ocho tantos, todos partiendo desde el banquillo.

Griezmann, por detrás de Sorloth

Pese a pasar casi de puntillas, lo cierto es que el rendimiento del delantero noruego ha sido una de las claves de la temporada rojiblanca. A pesar de sus escasas titularidades, el promedio de gol por partido del “9” es sinónimo de efectividad. En toda la temporada, el jugador ha participado en 50 encuentros. Sin embargo, los minutos apenas superan los 2.000. Una diferencia abismal de participación que le han dado un promedio de un gol cada 90 minutos, señal de que al noruego se le caen los goles. Sobre todo en actuaciones como la que tuvo ante la Real Sociedad con un póker en 30 minutos o la última en Montilivi para despedir el año con un hat-trick. Todo ese esfuerzo le ha valido para terminar el año por delante de Griezmann que tras el partido ante el Valladolid, solo firmó dos titularidades en los últimos siete encuentros. Una decisión sorprendente y a la vez lógica por el rendimiento de uno y otro. Ahora, con el Mundial a la vuelta de la esquina, llega el gran dilema para Simeone. Si optar por Sorloth de inicio, o por el francés. En cualquier caso, el elegido siempre estaría acompañando a Julián, inamovible del once del técnico argentino.

El futuro

Este final de temporada tan irregular del campeón del Mundo obliga a pensar en qué pasará con el jugador el próximo año. Con contrato hasta el verano de 2027, lo que parece claro es que esta nueva campaña será la última del francés en el Metropolitano, siempre y cuando no llegue una oferta irrechazable que pueda acelerar una prematura salida del jugador.

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