Rodrygo recupera la sonrisa

Todo cambia para Rodrygo Goes cuando cruza el charco para volver a Brasil. Sin demasiadas oportunidades en el Real Madrid, es una obviedad que su protagonismo con el conjunto merengue es mínimo. Titular en solo tres partidos este curso, su capacidad para generar peligro ha sido escasa cada vez que ha saltado al terreno de juego. De inicio ante el Oviedo, Marsella y Getafe, ha aportado una asistencia en los trece partidos que ha jugado. Para colmo, el sudamericano arrastra una racha negativa sin marcar que ha llevado al jugador a estar más de ocho meses sin ver puerta. Concretamente, desde el 4 de marzo ante el Atlético de Madrid en el partido de ida de los octavos de la Champions, aún con su ex técnico en el banquillo. Un dato que nada tiene que ver con sus participaciones con Brasil, donde se ha demostrado que sigue teniendo la confianza intacta de Carlo Ancelotti a pesar de las diferencias de las últimas semanas del italiano en el banquillo madridista.

Brasil, el escaparate de Rodrygo

Pese a que en Madrid no disfruta de los minutos suficientes como para tener continuidad, en Brasil la situación es bien distinta. Tras quedarse fuera en la convocatoria de septiembre, la primera de Carletto, el extremo ha estado en las dos últimas, siendo además protagonista. En octubre, ya con los partidos de clasificación para el Mundial acabados, la Canarinha sigue preparándose a base de amistosos y aunque las sensaciones no son nada alentadoras, el ex entrenador blanco sigue buscando la manera de dar con la tecla. De momento, el ‘11’ es igual de importante para él que cuando estaba en el Madrid. El brasileño es consciente de ello y por eso, su nivel es bien distinto.

Decisivo en el primer amistoso de octubre ante Corea del Sur con un doblete, en esa fecha, el italiano colocó al ex del Santos de mediapunta, en una posición mucho más centrada donde destacó notablemente. También tuvo minutos ante Japón en el segundo encuentro. Eso fue en octubre, de cara a esta ventana, ha sido titular ante Senegal en Londres, asistió a Casemiro en el 2-0, y fue sustituido en el minuto 83.

Una nueva prueba para el jugador que, al igual que ocurre con otros futbolistas como Gonzalo o Alaba, tienen más minutos lejos del conjunto blanco que con el propio Xabi Alonso. Una convocatoria realmente importante para seguir dando motivos a Carlo de que el madridista debe estar en el Mundial de 2026 con su selección.

En cuanto a su participación con el cuadro madridista, es cierto que cada vez su presencia en el tramo final de los partidos es más habitual. Aún así, su participación suele ser insuficiente. Con minutos en los últimos cuatro encuentros, aunque gozó de 20 minutos tanto en el Clásico como en Anfield, apenas generó peligro.

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