Xabi Alonso despeja la duda
La mano del tolosarra se empieza a notar en la mejor primera parte del equipo desde hace meses. Los blancos se jugarán su pase a cuartos ante la ‘Juve’.
Este Real Madrid sí que empieza a ilusionar, o por lo menos, el de la primera mitad. Con la obligación de dar una mejor versión que en los dos primeros encuentros, la presión añadida de jugarse la clasificación parece que motivó al equipo de Xabi Alonso. Jude Bellingham avisó en la previa de que habría “cambios” importantes, y vaya que sí los hubo. Con un cambio de esquema que parece que llega para ser importante en muchos tramos de la temporada, el propio Jude, como Güler o el propio Huijsen parece que van a ser indiscutibles. Gonzalo volvió a aprovechar su oportunidad.
45 minutos que marcan el camino
Era quizás el rival más exigente del grupo y acabó siendo un puro trámite. El gran nivel del conjunto merengue desde el primer minuto sorprendió a un equipo austriaco que no pudo aprovechar sus pocas bazas para intimidar a un Thibaut Courtois que, a diferencia de lo que pasó en el segundo partido, realizó su primera parada en el minuto 44. Desde una defensa bien adelantada hasta un ataque comprometido con la presión. Ese es el gran cambio del Madrid de Xabi. El tolosarra avisó que tenían que correr todos y, por lo menos ante el Salzburgo, el mensaje caló. Con una presión adelantada que prácticamente no se vio en la era Ancelotti, la primera parte fue de sobresaliente. Por no hablar de los cambios en el sistema.
A medida que van pasando las fechas, varios son los nombres propios que parecen coger fuerza en el esquema del entrenador español. Curiosamente, uno de ellos ha pasado en meses de tener pie y medio fuera a ser indiscutible. Es el caso de Aurelien Tchouameni. El francés, por momentos tercer central, formó parte de la defensa de cinco que instaló el técnico en la primera parte. Junto a Rudiger y Dean Huijsen, este último, sobresaliente, parece que la idea de tres centrales y dos carrileros empieza a coger fuerza.
Jude y Arda, reubicados
Acostumbrado a ver al inglés casi como un falso nueve, Xabi ya avisó que su lugar era el centro del campo y está empeñado en que sea así. Pero la principal novedad llegó cuando ubicó al británico volcado en la banda derecha. Como ocurrió con Valverde durante tantas veces, ahora parece que ese es su sitio, dejándole la medular tanto al uruguayo como al turco. Esta vez, Arda fue el creador del juego, viniendo a recibir la pelota casi entre los centrales y distribuyéndola a su antojo. Nada de jugar de extremo.
Gonzalo sí, Rodrygo siembra la duda
Parece que el Madrid ha encontrado a ‘su’ Joselu Mato. Con el deseo de que siga creciendo con el paso de los encuentros, el técnico sabe que tiene una opción de garantías lista para cuando los partidos se compliquen. Hasta ahora, su participación no puede ser mejor. Dos goles y una asistencia en tres partidos y la sensación de que le ha comido la tostada a Rodrygo. Mientras, el brasileño volvió a quedarse fuera por segundo partido consecutivo. Esta vez, por lo menos saltó al césped. Lo hizo en el 66′ y apenas dejó algún detalle puntual, muy lejos de lo que ha demostrado durante tantos años en el cuadro blanco.
La Juve, la prueba de fuego
En cualquier caso, esto no ha dejado de ser varias pruebas para preparar lo que está por delante. Con la Juventus como primer escollo en los octavos de final, ahora sí que se acabaron los experimentos. Los italianos serán los primeros de un camino en el que, presumiblemente, se crucen con Borussia Dortmund, Paris Saint Germain o Bayern de Múnich y Manchester City en una hipotética final. Sin duda, palabras mayores.
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