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No todo el mundo puede tener la efectividad de Carlos Alcaraz, por ejemplo, que después de su triunfo en Madrid suma cuatro de cuatro finales ganadas en tierra batida.

Hay tenistas que han sufrido mucho más para producir éxitos en su carrera, es el caso de Jan-Lennard Struff, el finalista del Masters de Madrid, que a sus 33 años nunca ha ganado un título ATP; el de Felix Auger-Aliassime, que perdió sus primeras siete finales; o el de Julien Benneteau, que llegó a ser el 25 del mundo y perdió las diez finales que jugó.

Un récord para el olvido

Esta no es la situación de Maria Sakkari, que sí ha ganado un título, el de Rabat en 2019, pero a cambio de disputar un gran número de semifinales, la mayoría de ellas sin éxito.

La griega, que ha llegado a ser la número 3 del mundo y ahora es la octava, ha jugado un total de 28 semifinales a nivel WTA, es decir, sin contar categorías inferiores, y solo ha ganado siete de ellas. Es uno de los peores registros y una losa mental para Sakkari.

De hecho, este año ha disputado cinco semifinales -United Cup, Linz, Doha, Indian Wells y Madrid- y las ha perdido todas. Solo ha ganado tres sets en esos cinco partidos.

7 victorias en 28 semifinales

Su última victoria en una semifinal data del torneo de Guadalajara, en octubre del año pasado, pero después perdió la final. Su peor racha de semifinales perdidas se dio entre mayo de 2019 y septiembre de 2021. Ahí, en total, perdió nueve semifinales seguidas, incluyendo la del US Open 2021 contra Emma Raducanu y la de Roland Garros, ante Barbora Krejcikova, ambas campeonas del torneo a la postre.

La única victoria en una semifinal que le ha reportado un título fue en Rabat 2019, cuando venció en dos sets a Alison Van Uytvanck para después ganar a Johanna Konta en la final.