¿Qué equipo fichará a Pep Guardiola?
La eliminación del Manchester City a manos del Real Madrid con un resultado abultado ha dejado tocado a un entrenador que dibuja dudas con sus palabras.
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Su gesto lo delataba. Las palabras, casi. Cuando a Pep Guardiola le tocó comparecer ante los medios, bien en la flash interview post partido, bien en la sala de prensa del Bernabéu, algo no iba bien. Porque Pep decía cosas. Pero su cuerpo y su tono decían lo contrario. O por lo menos, no lo decían con la misma rotundidad. “Me siento con fuerzas para seguir, sí”, comentaba en la televisión después de haber sido por el Real Madrid en la repesca de los octavos de la Champions League por un rotundo 3-1 en la ida tras el 2-3 en la vuelta. En total, un 6-3 global en la eliminatoria contra un contrario que estuvo, en todo momento, mejor en cuanto al juego que su rival, algo inédito para Pep y los suyos. Algo pasa.
Y eso se nota en el lenguaje corporal y el tono de un Guardiola más derrotado que de costumbre. Pero Pep, insiste: “Tengo fuerzas”, añade cada vez que se le cuestiona por su energía para liderar al City hacia una décima temporada consecutiva. Claro que en las argumentaciones Pep suele usar últimamente un tono en pasado llamativo, que parece estar haciendo más balance de su ciclo como preparador de los ‘Sky Blues’, que un punto de partida para el futuro.
“Han sido años extraordinarios”, repetía en las tripas del Bernabéu, aunque admitía que el proyecto del equipo necesita cambios, un comentario que riega las incógnitas sobre si decidirá echarse a un lado (como ya hizo agotado con el Barça en 2012) o si relativamente se refiere a que él liderará los cambios de un club con el que tiene contrato hasta 2027 tras su reciente renovación. En verdad, papel mojado si Pep decide marcharse. El City no lo retendría, parece ser, de pedir el adiós.
Por de pronto, esa decisión de si continuará o no puede depender de lo que haga el City en lo que queda de Premier. Parece claro que el título no lo peleará (él mismo lo ha descartado), pero ahora el objetivo es entrar entre los cuatro primeros, algo que las apuestas de fútbol de Betfair ven factible. Que el vigente campeón logre, al menos, ser equipo de Champions el curso que viene tiene una probabilidad implícita del 73,5% (cuota de 1.36€ por euro apostado). Opciones altas. Lo contrario sería un descalabro. Y ahí sí, podría tener consecuencias para el futuro de Guardiola.
¿Por qué equipo fichará Pep Guardiola?
Las opciones de salida de Pep Guardiola parecen, por ahora, escasas, pero no imposibles. Y cada vez más crecientes. Así que el escenario que se abre delante de él resulta novedoso, con pocos destinos a los que acudir. Un técnico tan élite como es Guardiola no tiene muchos destinos a los que acudir. Quizá uno de ellos pueda ser Italia. Porque el entrenador ahora del Manchester City ha entrenado ya en todas las grandes ligas, menos en Francia e Italia.
En el país galo el banquillo del PSG (que sería el único capaz de aunar glamour y potencial económico) parece vetado viendo que Luis Enrique camina firme en todas las competiciones. Asunto diferente sería su retorno a Italia, donde Pep ya fue jugador (en la Roma y Brescia) y en la que varios gigantes buscan el camino de retorno a la excelencia europea. Milan y Juventus, por ejemplo. Los dos han sido eliminados en esta repesca y hace años que no tocan gloria europea, aunque en el caso del Milan, la sequía es abisal comparada con la de la Juve.
En materia de clubes, siempre en España se especulará con la opción de que el Barça sea un buen destino para Guardiola, pero el retorno es, por ahora, vía remota por muchos motivos. Desde la buena trayectoria de Flick, hasta la falta de recursos económicos pasando por las dudas que siempre ha dejado Pep de una vuelta a la ciudad condal.
Destino cercano
¿Y en la Premier League? Esta opción, la de ver a Guardiola dejando el City para incorporarse a otro equipo top de la competición es quizá más improbable. Al menos en el corto plazo. Su sentido de la lealtad, ésa que ya ha manifestado al City en varias ocasiones, le impediría dar ese paso por lo menos con el banquillo del Etihad todavía adaptado a su figura. Asunto distinto sería en varios años tras una hipotética despedida.
A partir de ahí, en el horizonte emergen otras vías. Por ejemplo, la del año sabático. Ya le sucedió tras el adiós al Barcelona y aunque sólo seis meses después ya anunció que firmaba por el Bayern de Múnich, lo cierto es que Pep Guardiola cumplió ese curso completo sin entrenador.
Opciones en selecciones
En cuanto a las vías de las selecciones, dos nombres emergen. Una es Inglaterra. La selección de los tres leones ya ha soñado en alguna ocasión con incorporar al entrenador de Sant Pedor. Ser extranjero no sería problema para un país acostumbrado a tener técnicos de otros países. De hecho, el actual seleccionador es alemán: Thomas Tuchel. Precisamente el reciente relevo en este puesto hace pensar que, de firmar por la Federación Inglesa, Guardiola no lo haría de manera inmediata. El Mundial 2026 emerge a la vuelta de la esquina.
Para esa cita quería Brasil encontrar un entrenador revolucionario vista las dudas que vierte Dorival Junior en el puesto. La mirada de la Confederación Brasileña se dirigió a Europa e incluso se llegaron a manejar dos nombres a la altura de las cinco estrellas que luce su pecho: Carlo Ancelotti (esta vía se descartó con su renovación) y el mismo Pep Guardiola. Estilos de fútbol parecidos que, sin embargo, han quedado aparcados visto que ninguno de estos dos técnicos podía fichar. En el caso de Brasil sucede que la clasificación para el Mundial sigue regando de dudas a su actual banquillo y, quién sabe, una sacudida previa a la disputa del torneo de 2026 podría impulsar la vía Pep siempre que el entrenador abandonase el City al final de esta temporada.
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