A la Liga se le atascan los penaltis

Los penaltis vuelven a poner a La Liga en el punto de mira, esta vez apartada de la polémica que a menudo sobrevuela a los tiros de gracia. Se trata de una tendencia que acompaña a la máxima competición del futbol español en los últimos años: el porcentaje de conversión desde los once metros. Las jornadas previas al parón de selecciones han dado la voz de alarma: de los últimos cinco penaltis lanzados en LaLiga solo uno ha acabado dentro del arco. Y surge la duda ¿se tiran cada vez peor los penaltis o han mejorado los guardametas?

En esta temporada 23/24 se han convertido aproximadamente un 76% de los 79 penaltis lanzados hasta la fecha, tras 289 partidos y a falta de nueve jornadas para el fin de la competición, que ya tiene como claro favorito al Real Madrid. Así lo presupone la casa de apuestas Betfair, que sitúa al equipo merengue como máximo aspirante al título con una cuota de 1.03.

Porteros vs. rematadores

Más penaltis fallados no implica necesariamente una bajada en el rendimiento de los rematadores de penaltis de la Liga, y es que la superioridad de los arqueros de equipos españoles a nivel europeo es palpable desde hace años. Los porteros quizás hayan mejorado sus estadísticas, sí, en detrimento de los tiradores, pero hoy en día todo está meticulosamente estudiado; los guardametas conocen las debilidades del lanzador, han desarrollado nuevas técnicas y mejorado sus reflejos. Repasemos como evidencia los últimos cinco penaltis lanzados en LaLiga.

En el encuentro entre Atlético de Madrid y Real Betis, Rui Silva paró la pena máxima a Morata, y hasta los dos rechaces inmediatamente posteriores, en un partido que acabarían llevándose los colchoneros. El tiro de Gündogan en el Barcelona-Mallorca fue atajado por Rajkovic haciendo gala de grandes reflejos. Algo similar ocurrió tras el disparo de Luis Rioja a Unai Simón en el encuentro entre el Athletic y el Alavés. La gran exhibición de Mamardashvili no fue suficiente para que el Valencia se llevara la victoria ante el Villarreal. El georgiano detuvo un penalti tras adivinar perfectamente las intenciones de Baena.

Consiguió zafarse de la maldición de los penaltis Uzuni, que no falló desde los once metros pese a que Alex Remiro acertó el lado del lanzamiento. Aunque no logró la victoria para el Granada, que cayó por dos a tres ante la Real Sociedad.

¿Y en Europa?

Cabe mencionar que LaLiga es la competición doméstica con menor porcentaje de penaltis señalados por partido de las cinco grandes ligas europeas. Los espectadores de LaLiga ven, en promedio, 0,27 penaltis por partido; eso es menos de un penalti cada tres encuentros.

Si hablamos de los porcentajes de acierto, la conversión de penaltis en gol es bastante equitativa para los campeonatos más relevantes del continente. En la última jornada disputada antes del parón de selecciones, la Ligue 1 francesa se mueve en el mismo ratio que LaLiga, en torno al 76% de acierto, y muy similar a la Bundesliga con un 77,5%. La proporción baja ligeramente hasta el 74,3% en el caso de la Serie A, y despunta por su alta tasa de conversión la Premier League, donde el 88,6% de los lanzamientos desde el punto de castigo acaban en gol.

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