Juego Seguro. 18+ Juega con Responsabilidad.

Es muy importante tener un concepto claro antes de nada. El juego patológico no es un vicio, sino que es considerado un problema psicológico que afecta a diversos aspectos de la vida como son el laboral, social, económico o familiar. La persona que está realizando la actividad ve afectada su capacidad para poder autocontrolarse y es incapaz de rechazar el impulso o deseo por jugar. Además, con bastante frecuencia, tratará de negarse inicialmente el problema.

Son sus familiares más cercanos o el entorno que le rodea asiduamente el que empieza a percibir cambios en su estado de ánimo como irritabilidad, ansiedad, insomnio o mal humor. Según la Asociación Americana de Psiquiatría, el comportamiento de juego desordenado o patológico está caracterizado por alguno de los siguientes criterios:

- Preocupación por el juego: el síntoma se percibe cuando la persona trata de compensar, por ejemplo, ventajas entre competidores o planificar próximas jugadas. Igualmente, se puede detectar cuando el dinero entra en juego en esta ecuación y el jugador trata de buscar la manera de obtenerlo sin importar las formas.

- Necesidad de jugar con grandes cantidades: cuando la actividad pasa de ser lúdica y mero entretenimiento a realizarse a través de partidas o apuestas con una cantidad exacerbada.

- Imposibilidad para detener el juego: en estos casos la inquietud o irritabilidad aflora en el jugador cuando se interrumpe o se detiene el juego

- El juego como estrategia: otro síntoma claro de adicción al juego es utilizar el mismo como estrategia para escapar de los problemas o para aliviar la disforia (sentimiento de culpa, ansiedad, depresión…)

- Actos ilícitos: cuando el jugador comienza a inmiscuir en su vida actividades ilegales como falsificación, fraude o robo para conseguir su principal objetivo: jugar.